lunes, 10 de septiembre de 2012

LA TORPEZA DEL HINCHA Y LOS PERIODISTAS DEPORTIVOS DEL PERÚ


Tal y como lo dije en el post anterior, los titulares de la prensa nacional fueron de lo más triunfalistas e irreales: Perú le ganó a Venezuela 2-1, lo cual nos alarga un poco la agonía de la eliminación y nos evita la vergüenza de cerrar la tabla, nada más. Sin embargo todos dijeron "el Perú renace", "aun estamos en carrera" y etc. En la televisión hablaban de "la resurrección del Perú" y un ignaro reportero de ATV, que fingía euforia en la tribuna, terminó como víctima voluntaria de la chacota del hincha peruano - no pude evitar la carcajada cuando el compadrito, con buzo rojo y micrófono en mano, era sometido a un brutal apanado en la tribuna, por todos los palomillas de tribuna norte, mientras él decía, sin dejar de fingir aunque se le notaba la incomodidad por los lapos y jaladas de pelo por detrás que le propinaron, "así es la euforia del triunfo".

Ahora quiero detenerme en dos detalles que deberían ser puestos sobre la mesa:

En primer lugar: si la selección de Perú hubiera jugado en el Estadio Nacional de Santiago y "las sagradas notas" de nuestro Himno Nacional hubiesen sido aplacadas por una ensordecedora rechifla de hinchas chilenos, dueños de casa, al día siguiente habrían abundado los reportajes patrioteros, denunciando y rechazando categóricamente - como los políticos - el comportamiento salvaje e irrespetuoso de nuestros "hermanos del sur". No habrían faltado "tweets" de Nadine o de Gastón...

Sin embargo, en estos dos días de fiesta por un triunfo cualquiera, no escuché a ningún líder de opinión criticar el deplorable comportamiento de la hinchada peruana, que irrespetó de la manera más vulgar, callejonera y vergonzosa al pueblo venezolano, con una silbatina espantosa que no permitió escuchar las sagradas notas de su himno, en nuestro estadio. ¿Eso tiene que ver con alentar al equipo peruano? ¿esa gente, que tiene una posición económica que le permite ir al estadio, que supuestamente pertenece a la sociedad progresista y exitosa, con sus tablets y blackberries en la mano, merece que su selección vaya a un mundial cuando es incapaz de guardar las formas en lo que se supone es una fiesta deportiva? O de repente me equivoco y las tribunas Occidente, Oriente, Populares y Palcos estaban llenas de obreros de construcción civil...

Y en segundo: si el primer gol de Jefferson Farfán hubiera sido de un venezolano, hasta ahora estarían hablando de que el árbitro se parcializó con Venezuela por la clara posición de off-side en la que se produjo el tanto. Quizás sea discutible, pero para mí estaba fuera de juego con absoluta claridad...

Sin embargo, los comentaristas callaron en siete idiomas, y gritaron el gol como si nada hubiese pasado. Incluso en los resúmenes y repeticiones del fin de semana, ponían una y otra vez el segundo gol de Farfán pero el primero, casi como si no hubiese ocurrido, desapareció de los análisis profundos. ¿Esa es la imparcialidad que les enseñaron a los periodistas deportivos de este país? Vender fantasías y alimentar sueños falsos no corresponde con el ejercicio real de la comunicación social. Tiene que ver con mantener adormecido al público para que sigan consumiendo, para que sigan distrayéndose y creando gestas históricas de la nada.

Finalmente, nuestras más sentidas condolencias a la familia del joven de 23 años Jorge Amado Naranjo Estrada, que falleció en tribuna sur de un infarto, luego de celebrar el segundo gol de Perú. Según diversos reportes periodísticos, Naranjo no recibió ayuda médica inmediata por lo que su fallecimiento podría ser considerado una negligencia de la organización, a cargo de la infame FPF de Manuel Burga y compañía. La prensa habló del tema pero con cierta indiferencia y un reportero de Frecuencia Latina hasta lo mencionó entre los efectos de la alegría que "el equipo de todos le había devuelto al país".

Algo muy grande nos falta como nación para haber alcanzado estos niveles de barbarie, tanto en la hinchada malcriada como en la prensa intolerantemente tonta...

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